La noche era oscura y fría, miró hacia ambos lados de la calle pero no vio a nadie. Encendió un cigarrillo y empezó a caminar de espaldas a la luna, que ya comenzaba a nacer entre las altas y lejanas chimeneas de las fábricas. Fue justo entonces cuando pensó, no sin cierto asombro, que nunca se hubiera imaginado que podría ganarse la vida asustando a niños.
de quién seremos nosotros el monstruo
ResponderEliminarFelicidades por el nuevo y atractivo aspecto del blog, y en cuanto al contenido y a la persona de la que emana: siempre consigues que aprenda a enseñarme algo nuevo.
ResponderEliminarmcopola
El Coco ha sido de color verde pistacho de toda la vida, ese asustador es un impostor o es poco profesional.
ResponderEliminarJajajaja!
ResponderEliminarPor que azul?
Saludos.